¿Cómo cuidar un perro?
¿Estás considerando llevar un perro a tu casa? Los perros son amigos leales y cariñosos, y suelen darnos mucho más amor del que les ofrecemos. Sin embargo, ellos requieren mucho cuidado para mantenerse saludables y felices. Si estás planeando llevar un perro a tu casa, hay muchas cosas que debes considerar para garantizar una relación larga y saludable.
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Haz que tu casa sea segura para perros. Si bien muchos objetos pueden parecer inofensivos para tu perro o no esperas que se interesen en ellos, lo mejor es mantener los objetos pequeños y los juguetes para personas lejos del piso o de cualquier área fácil de alcanzar en donde tu perro estará.
- En tu casa y en tu patio hay muchos productos que son peligrosos para los perros y debes mantenerlos fuera de su alcance, guardándolos en un área de almacenamiento o en un lugar que no sea accesible para el animal. Algunos de los objetos más comunes incluyen a los productos de limpieza para el hogar, los insecticidas, los fertilizantes y los venenos para los ratones y las ratas.
- Las plantas interiores de tu casa y las plantas del patio o jardín pueden ser tóxicas. Estas incluyen a los rododendros, los crisantemos y la adelfa. Identifica a las plantas de tu casa y tu jardín, luego comunícate con el veterinario o visita las páginas de Internet como la de la Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales y Pet poison helpline o contacta con la institución pertinente en tu país para obtener listas completas de toxinas para mascotas.
- Asimismo, tanto los medicamentos para humanos como para animales pueden ser tóxicos para tu perro, en especial si consume grandes cantidades. Algunos de los alimentos que consumimos (incluidos los chocolates, las cebollas, las pasas, las uvas e incluso las gomas de mascar sin azúcar) también pueden ser tóxicos para los perros y deben mantenerse lejos de su alcance.
Dale a tu perro un área designada. Antes de llevar un perro a tu casa, una de las primeras cosas que debes decidir es en qué área se encontrará el perro. Piensa cuáles serán las áreas de la casa a las que podrá acceder y cuáles serán a las que no podrá acceder. Estas reglas deben aplicarse desde el inicio para evitar confusiones.- Tu perro necesitará áreas designadas para comer y dormir, y mucho espacio para jugar y ejercitarse. Al inicio, puedes limitar las áreas a las que el perro podrá acceder para observarlo detenidamente hasta que conozcas mejor a tu mascota y su comportamiento.
- La cocina o cualquier otra área fácil de limpiar es un buen lugar para colocar sus tazones de comida y de agua. Después de haber elegido un lugar, tendrás que mantenerlo allí todo el tiempo.
- Ahora decide en dónde dormirá tu perro. A algunas personas les gusta que su perro duerma en la cama con ellos, mientras que otras prefieren conseguirle una cama para perro o una perrera para que duerman en otro lado. Ten en cuenta que una vez que permitas que tu perro duerma en tu cama, puede ser mucho más difícil que duerma en la suya propia.
- El tamaño y el nivel de actividad de tu perro determinarán el espacio que necesitará para jugar y ejercitarse. Por lo general, mientras más grande sea el perro, mayor será el espacio que necesitará.[2]
Compra todos los suministros que necesitarás. Podrían venderte al perro con algunos de estos objetos incluidos, pero tendrás que comprar un collar y una correa apropiados para el tamaño de tu perro, y uno o dos juguetes en caso de ser un dueño principiante. También necesitarás tazones para la comida y el agua, así como comida.- Si sabes cuál es la comida que tu perro ha estado consumiendo, lo mejor es continuar alimentándolo con esa misma comida, por lo menos al principio. Llegar a un nuevo hogar puede ser estresante para cualquier perro y cambiarle la comida puede estresarlo más. Si decides cambiar la comida en un futuro, puedes hacerlo, pero asegúrate de hacerlo de forma gradual en el transcurso de 5 a 7 días. Esto ayudará a evitar problemas, como la diarrea o el malestar estomacal, que pueden ocurrir cuando cambias la comida muy rápido.
Satisface las necesidades básicas de tu perro
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Compra una marca de comida que contenga ingredientes de alta calidad.También puedes hacer tu propia comida para perro. No alimentes a tu perro con demasiada azúcar, comidas fritas u otras golosinas para humanos. Con el tiempo, estos lastimarán la salud de tu perro. NUNCA alimentes a un perro con chocolate.
- Por lo general, los perros de raza grande deben alimentarse con una fórmula para cachorros de raza grande hasta que tengan aproximadamente un año de edad. A partir de esa edad, debes cambiar su dieta a una dieta para adultos y luego a una para perros viejos cuando tengan alrededor de seis años. Los perros de raza pequeña y mediana deben alimentarse con una fórmula para cachorros hasta que tengan aproximadamente un año de edad, luego deben adoptar una dieta para adultos.
Alimenta a tu perro siguiendo un horario regular. Diferentes perros tienen diferentes necesidades en lo que respecta a la comida. Si tu perro tiene menos de un año de edad, podría necesitar muchas comidas al día. Esto puede reducirse a dos comidas al día para la mayoría de perros cuando tienen alrededor de seis meses de edad. A medida que envejecen y suelen estar menos activos, es normal que algunos perros solo quieran consumir una comida al día.- Trata de alimentar a tu perro a la misma hora, todos los días. Esto ayuda a que tu perro sepa cuándo es la hora de la comida y te ayuda a saber cuánto come tu perro. Esto puede ser importante si estás tratando de enseñarle a hacer sus necesidades en un área específica, si ocurre una disminución del apetito y también para prevenir la obesidad.
Observa el apetito de tu perro y sus hábitos alimenticios. Debes medir la cantidad apropiada de comida para poder controlar cuánto come tu perro. Deja que tu perro coma alrededor de 10 a 15 minutos y luego retira el tazón hasta la próxima comida. Si no se come toda la comida en ese tiempo, estará más hambriento y es más probable que se la termine en la próxima comida.- Una buena forma de saber si tu perro está consumiendo una cantidad adecuada o una cantidad excesiva de comida es observar su peso y su apariencia. Para algunas razas más activas que tienen un tipo de cuerpo determinado, puede ser normal que sus costillas estén a la vista; sin embargo, para la mayoría de los perros esto es un signo de que no están comiendo lo suficiente. Asimismo, si no puedes sentir sus costillas es probable que esté comiendo demasiado. Siempre consulta a un veterinario si tienes dudas sobre cuánto debe pesar tu perro o cómo debe lucir.
- Dejar que el perro coma cuando desee, lo que consiste en dejar la comida a su alcance en todo momento, puede ser una forma fácil de alimentar a tu perro, pero ten en cuenta que algunos perros comerán en exceso y tendrán que adoptar una alimentación con una porción fija y un horario regular.
- Los cachorros que están volviéndose obesos podrían requerir modificaciones en la cantidad de comida que reciben y rutinas de ejercicio. Lo mejor es consultar a un veterinario antes de hacer alguna modificación. Cuando los perros tienen alrededor de ocho años de edad, deben adoptar una dieta para perros viejos. Esto ayuda a prevenir un consumo de calorías y un aumento de peso excesivos que pueden ocurrir en un perro más viejo y menos activo. Es esencial que siempre tenga agua fresca a su disposición.
Dale agua en todo momento. Es esencial que el tazón de agua de tu perro siempre esté lleno con agua fresca. Los perros necesitan beber cuando están sedientos, y beber toda el agua que desean no les hará daño. Puedes colocar algunos cubos de hielo en el agua para mantenerla agradable y fría en los días calurosos.Asegúrate de que tu perro se ejercite lo suficiente. Los perros necesitan correr y jugar para mantenerse saludables y felices. En general, lleva a tu perro a dar al menos una caminata de 30 minutos al día, aunque es probable que esto no esté ni cerca de ser suficiente actividad para un perro con mucha energía.- Sacar a tu perro al aire libre para que se calme no es ejercicio suficiente. Asegúrate de que tu perro se canse un poco todos los días.
- La cantidad de ejercicio que tu perro necesita dependerá de su edad, raza, salud y nivel de energía en general. Los perros jóvenes de razas muy enérgicas necesitarán mucho más ejercicio que los perros viejos de razas menos activas. Ten en cuenta que algunas razas no son aptas para una cantidad de ejercicio que es adecuada para otras.
- Si es posible, encuentra un lugar en el que la ley permita quitarle la correa a los perros y deja que tu perro corra y se estire.
- Para evitar las lesiones en los huesos y las articulaciones de los cachorros, suele recomendarse no pasearlos corriendo ni realizar algún otro tipo de ejercicios repetitivos de alto impacto, como saltar de lugares altos. Como siempre, consulta a un veterinario para que te recomiende ejercicios.
- Interactuar con tu perro jugando una variedad de juegos lo mantendrá estimulado tanto física como mentalmente y también ayudará a entablar un fuerte vínculo entre ustedes.[6]
- Asimismo, dependiendo del nivel de actividad de tu perro y tu horario, un día dedicado al cuidado de tu perro puede ser una forma grandiosa de darle el ejercicio que necesita y dejarlo interactuar con otros perros y otras personas.
- Una cantidad insuficiente de ejercicio puede hacer que el perro se aburra, lo que puede provocar muchos problemas de comportamiento, incluidos los destructivos. Esto también puede causar obesidad, lo cual puede provocar muchos problemas de salud relacionados y debe evitarse a toda costa.
Mantén a tu perro saludable
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Cepilla a tu perro. Diferentes razas de perros requieren diferentes estrategias de cepillado. En general, los perros deben ser cepillados aproximadamente una vez a la semana para ayudarlos a mudar de pelo. Las razas con pelo largo pueden necesitar un cepillado más frecuente para evitar la formación de mechones enredados y también pueden requerir cortes de pelo constantes. Algunas razas tienen calor en el verano y se sienten mejor cuando las afeitan ya que empieza a hacer calor en las calles. Determina qué hábitos de cepillado son mejores para el pelaje y las uñas de tu perro.
- Revisa si tu perro tiene pulgas o garrapatas cuando lo cepilles y elimínalas con un peine para pulgas y garrapatas. Es probable que necesites que el veterinario te dé un medicamento de buena calidad para la prevención de pulgas.
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Baña a tu perro dejando un par de semanas. Los perros no necesitan baños con tanta frecuencia como los humanos, pero cuando empiezan a oler mal o se ensucian con lodo u otros residuos, es necesario bañarlos. Trata de usar agua tibia y un champú suave natural diseñado específicamente para perros y que no irritará su piel.
- A los perros les gusta correr después de bañarse, así que puedes controlar el tiempo del baño para que después el perro pueda correr fuera de casa.
- Bañar y cepillar también es una buena forma de verificar si tu perro tiene un corte o una protuberancia que requiera atención médica.
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3Asegúrate de que tu perro reciba una atención veterinaria de rutina. Los chequeos regulares con el veterinario pueden ayudar a prevenir o detectar problemas en una etapa temprana. Las visitas de rutina al veterinario incluyen un examen físico, un examen de heces y un examen para detectar la presencia de dirofilaria immitis. El veterinario también puede recomendarte los análisis de sangre de rutina para verificar la presencia de problemas subyacentes que aún son imperceptibles y cuyo tratamiento es más efectivo si se realiza lo más pronto posible.
- Los medicamentos comunes que el veterinario puede recomendar incluyen a los medicamentos preventivos para la dirofilaria immitis, los antiparasitarios comunes y los medicamentos preventivos para las pulgas y las garrapatas; estos dependen de la estación y el área del país en la que vives.
- Asegúrate de que tu perro haya recibido todas las inmunizaciones necesarias. Esto ayudará a mantenerlo feliz y saludable. Las inmunizaciones estándar para los perros incluyen a la vacuna para la rabia, que se administra a las 12 semanas de edad o a más y luego cada 1 a 3 años dependiendo de las leyes locales y las recomendaciones del veterinario. Las vacunas para el moquillo, la parvovirosis y la hepatitis suelen administrarse juntas. Los cachorros deben recibir un grupo de cuatro inyecciones cada tres semanas empezando a las seis semanas de edad y luego de forma anual, y nuevamente en la adultez, siguiendo las recomendaciones del veterinario.
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Considera hacer que castren o esterilicen a tu perro. El castrado y la esterilización son procedimientos que previenen los embarazos no deseados y pueden ayudar a eliminar muchos problemas de salud y de comportamiento. La esterilización puede prevenir el cáncer en los testículos, los problemas con la próstata, el marcaje urinario y algunos comportamientos agresivos en los machos. Las hembras castradas presentan una incidencia mucho menor de tumores en las mamas y ninguna posibilidad de sufrir infecciones uterinas o cáncer de útero.
- Lo ideal es que se le realice este procedimiento al cachorro aproximadamente a los seis meses de edad. Conversa con el veterinario sobre este procedimiento durante las visitas regulares que realices con tu cachorro o en la primera visita después de adoptar a un perro adulto.
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Supervisa la salud general de tu perro. Conocer sus hábitos alimenticios, niveles de actividad y peso normales te ayudará a darte cuenta cuando las cosas cambian y son formas más fáciles de controlar su salud. Observar sus hábitos normales para ir al baño te ayudará a notar todo cambio que pueda indicar la presencia de un problema de salud. Revisar con frecuencia el hocico, los dientes, los ojos y las orejas de tu perro te ayudará a identificar los problemas lo más pronto posible. Debes revisarlo con frecuencia para verificar si tiene protuberancias o cortes. Debes observar todo cambio en la forma en la que tu perro camina o se mueve.
- Consulta a un veterinario cuando notes algún cambio en el estado habitual de tu perro.
Entrena a tu perro
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1Enséñale a tu perro a ir al baño. Cuando lleves un nuevo cachorro o un perro adulto a tu casa, una de las primeras cosas que debes lograr es enseñarle a hacer sus necesidades fuera de la casa, no dentro de ella. Cualquier perro de cualquier edad puede ser entrenado con la guía adecuada.
- Hay algunas reglas que deben seguirse hasta que lo hayas entrenado y que serán de ayuda en el proceso. Limita las áreas a las que tu perro tiene acceso para poder observarlo de cerca y determinar el momento en el que quiere ir al baño y sacarlo de inmediato. Establece un horario para llevarlo fuera de la casa, el cual incluya a la primera hora de la mañana, después de las comidas, todo momento en el que llegues a casa y justo antes de ir a dormir.
- Los cachorros necesitarán ir al baño con más frecuencia cuando son jóvenes y, como regla general, ellos pueden aguantar la orina una hora más por cada mes de edad que tengan.
- Mantener a tu perro con la correa puesta, incluso dentro de casa, te permitirá observarlo más de cerca hasta que esté entrenado. Cuando salgan a la calle, también mantenlo con la correa puesta para que puedas enseñarle a hacer sus necesidades en un lugar específico y para saber cuándo ya lo ha hecho.
- Puedes enseñarle una palabra como “hazlo” para enseñarle a hacer sus necesidades en un lugar específico. Si notas que está empezando a hacer sus necesidades dentro de la casa, dile “no”, sácalo fuera de la casa y dile “hazlo”. Siempre elógialo cuando haga sus necesidades en el lugar en el que debe hacerlas.
- Si sufre un accidente en la casa, asegúrate de limpiar bien el área para evitar que quiera hacer sus necesidades en el mismo lugar.
- Nunca golpees ni regañes a un perro por hacer sus necesidades dentro de casa. El perro solo aprenderá a temerte.
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Entrena a tu perro para que entre en la perrera. Esto le dará a tu perro un lugar en donde pueda sentirse seguro y feliz cuando no estés en casa, y esta es otra opción popular para prevenir accidentes.
- Con este método, trata de hacer que la perrera sea un lugar divertido dándole al perro una golosina o un juguete y limita la cantidad de tiempo que pasa en la perrera a menos de 4 horas en una sola ocasión, y mucho menos para los cachorros jóvenes. Cuando lo saques de la perrera, sácalo de inmediato de la casa y llévalo a su área designada, y no olvides elogiarlo cuando haga sus necesidades.
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Enséñale a tu cachorro a jugar de forma adecuada. Los perros suelen tener un buen carácter y la mayoría juega de forma adecuada con los niños. Aun así, a algunos les gusta morder y arañar un poco fuerte cuando juegan, así que es importante entrenarlo para que sepa cómo jugar de forma adecuada. Premia a tu perro por jugar con delicadeza e ignóralo si empieza a morderte. Con el tiempo, aprenderá que ser delicado es más divertido.
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Enséñale a tu perro a no ladrar demasiado. Ladrar es una actividad normal para los perros y es una de las formas en las que se comunican, pero ladrar demasiado es una acción común y molestosa que muchos dueños de perros desean corregir. Hay diferentes tipos de ladrido y algunos requieren acciones muy específicas para tratar de frenar el problema. Este suele ser un proceso lento y gradual que también requiere mucha paciencia.
- Existen algunas pautas generales para enseñarle a tu perro a no ladrar por cualquier pequeño detalle. Identificar los factores que hacen que ladre y luego eliminarlos (como cerrar las persianas o colocarlo en un área en la que no pueda ver a lo que le está ladrando) es un buen primer paso. Si no deja de ladrar, colócalo en una habitación tranquila o en su perrera, sin ningún estímulo, y deja que se calme. Prémialo tan pronto como deje de hacerlo.
- Gritarle a tu perro cuando ladra es un instinto natural, pero eso puede hacerle pensar que estás ladrando junto con él.
- Si tu perro es un ladrador compulsivo, trata de aumentar las horas de ejercicio y juego.
- Los perros que ladran en busca de atención deben ser ignorados y nunca deben ser premiados hasta que dejen de ladrar.
- Este puede ser un problema difícil de corregir y puede requerir la ayuda de un especialista en comportamiento animal capacitado o un entrenador. Solo usa un collar antiladridos, después de consultar a un profesional capacitado.
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Enséñale a tu perro algunas órdenes y trucos. Las órdenes básicas, como siéntate, quieto y ven aquí son formas útiles de mantener a tu perro seguro ayudando a evitar que se aleje mucho y que se pierda cuando le quitas la correa fuera de casa. Estas también ayudan a enseñarle a tu perro cuál es su lugar en su relación y a que forme un vínculo más sólido contigo.
- Otras órdenes ofrecen una forma divertida en la que pueden interactuar y jugar. Puedes enseñarle a sentarse, a seguirte cuando lo llamas, a quedarse quieto, a echarse y a rodar.
Advertencias
- Castra o esteriliza a tus perros para evitar que se reproduzcan por accidente. El castrado también reduce el riesgo de sufrir cáncer de útero y de ovario en las hembras, y la esterilización reduce la probabilidad de sufrir cáncer de testículos en los machos. Los machos esterilizados también son menos agresivos.
Cosas que necesitarás
- Comida para perros de alta calidad aprobada por la AAFCO (si vives en los Estados Unidos)
- Tazones individuales para agua y comida para cada perro
- Golosinas para perros
- Una botella de plástico llena con monedas
- Juguetes para perros, como cuerdas para morder, pelotas y juguetes de goma huecos
- Perreras (opcional)
Fuente: http://es.wikihow.com/cuidar-perros